Pocas sensaciones son tan agradables como ponerte una prenda recién lavada, de tacto esponjoso e intenso olor a limpio. Más aún si es ropa interior, ya que va en contacto directo con la piel. Por eso es tan frustrante cuando queda rígida y rugosa. Apúntate estos trucos y consejos de Abanderado para suavizar ropa áspera y te olvidarás de este problema tras hacer la colada.
¿Por qué la ropa se queda rígida tras el lavado?
Para solucionar un contratiempo hay que empezar por saber las causas que lo producen. En el caso de la ropa lavada, el efecto acartonado se debe a varios motivos. Para empezar, tanto si lavas a mano como a máquina, la dureza del agua es un factor determinante. También lo es un aclarado incorrecto que no elimine todos los restos de jabón.
Si usas lavadora, la clave es acertar con la dosis de detergente. Además, es importante que no se mezclen jabón y suavizante. Y por último, si cargas tu lavadora con demasiada ropa corres el riesgo de que el jabón no se disuelva, provocando ese odioso acartonamiento de la ropa.
Cómo suavizar ropa áspera: trucos infalibles para devolver la suavidad a tus prendas
Los suavizantes para la ropa son un producto relativamente reciente, ya que aparecieron en la década de los 30 del siglo XX, y su auge está ligado a la generalización del uso de las lavadoras automáticas. Sin embargo, no siempre son la solución más eficaz para suavizar ropa áspera. O puede que hayas decidido prescindir del suavizante para optar por un lavado ecológico de la ropa. En cualquier caso, hay fórmulas alternativas y naturales al suavizante para evitar la ropa áspera. Hemos seleccionado las más eficaces.
Bicarbonato de sodio
Apenas hay consejos de limpieza en los que no se cite al bicarbonato de sodio. Por eso, siempre te recomendamos que tengas un bote en tu despensa. Desde luego, es uno de los imprescindibles para suavizar la ropa áspera. Usarlo no tiene ningún misterio:
- Pon en marcha la lavadora y espera a que el tambor se llene de agua.
- En ese momento, añade media taza de bicarbonato en el cajetín con el detergente.
- Realiza el lavado de manera habitual.
Este truco del bicarbonato es especialmente interesante si vives en una zona de aguas duras, ya que regula el pH. Pero además de suavizar ropa áspera, te proporciona otras ventajas añadidas. Para empezar, elimina los malos olores y ayuda a mantener tu lavadora en perfecto estado.
Vinagre
De nuevo, recurrimos a un clásico de los productos de limpieza naturales: el vinagre. En este caso, se trata de un sustituto perfecto del tradicional suavizante. Sí, tal y como suena, puedes añadir una taza de vinagre blanco en el departamento del suavizante de tu lavadora y verás cómo sale la ropa más suave al tacto.
La única precaución que debes tener es no ponerlo desde el principio, sino cuando comience el ciclo de enjuague y aclarado. De esta forma, te aseguras de que la colada no quede impregnada del fuerte olor característico del vinagre.
Y una última recomendación: para suavizar la ropa áspera con este truco, es mejor que uses vinagre blanco, ya que es uno de los mejores suavizantes naturales.
Combinación de bicarbonato y vinagre
El tercer método para suavizar ropa áspera consiste en combinar los dos productos anteriores, es decir, el bicarbonato de sodio y el vinagre. Estos son los pasos a seguir para preparar tu suavizante casero:
- En un bol, vierte una taza de bicarbonato.
- Añade 7 tazas de vinagre.
- Mezcla hasta conseguir que los dos productos estén completamente integrados.
Ahora que ya lo tienes, se trata de añadir un tercio de taza de esta combinación de vinagre y bicarbonato en lugar del suavizante convencional. Puedes hacerlo desde el inicio del lavado o en el ciclo de aclarado. Lo importante es que no te equivoques de lugar, tienes que ponerlo en el dispensador del suavizante.
No abuses de la cantidad de detergente utilizada
Ya adelantábamos que una de las causas del acartonamiento y rigidez de la ropa es calcular mal la cantidad de detergente que pones en la lavadora. No te pases por exceso o se quedará jabón pegado a las fibras y la prenda quedará áspera; ni por defecto, porque puede que la cantidad sea insuficiente para eliminar la suciedad. Así que cíñete a las recomendaciones del fabricante de tu jabón preferido.
Utiliza el compartimento adecuado para el detergente
Todos los modelos de lavadoras cuentan con cajetines diferenciados para el jabón y para el suavizante. Es importante que pongas cada producto en el que le corresponde, porque así se incorporan en el momento del ciclo de lavado que les corresponde a cada uno. Si el jabón entra con el suavizante, se queda fijado en las fibras y la ropa sale acartonada.
No mezcles suavizante y detergente
Además de tener cuidado con poner cada producto donde procede, es aconsejable que, cada cierto tiempo, saques el cajón y lo limpies bien con abundante agua tibia. Con el uso, se van quedando restos en las paredes y acaban afectando a la limpieza y suavidad de tu colada.
Comprueba la dureza del agua
Finalmente, nos detenemos en el tema de la dureza del agua y cómo afecta a la suavidad de tu ropa. Se considera agua dura la que tiene un elevado contenido de sales minerales, sobre todo, magnesio y calcio. Este tipo de aguas dificulta la limpieza, porque al jabón le cuesta hacer espuma y es menos efectivo. Evidentemente, no puedes elegir el tipo de agua que sale por tu grifo, ya que esto depende de la zona dónde vives. Pero sí es esencial que mires las instrucciones que figuran en el envase de tu jabón y que pongas la cantidad recomendada según la dureza del agua de tu casa.
Con estos trucos, ya no tienes que sentir la incomodidad de vestir prendas acartonadas después de cada lavado. Estos consejos son sencillos, asequibles y, lo más importante, ¡funcionan! A partir de ahora ya puedes disfrutar siempre de la suavidad que caracteriza a todas las prendas de ropa interior de cualquier colección de Abanderado. Será como estrenarlas de nuevo cada vez que te las pones.